A Beatriz Millán su primera hija le llegó arrasando, llevándose por delante todo lo que ella era, o creía ser, y haciendo que se reinventase para encontrar con el tiempo una versión mejorada de sí misma: «Más cansada y más crítica, con sueño de más y prejuicios de menos». En este libro Beatriz nos traslada su visión de la maternidad: libre de ideas preconcebidas y falsas idealizaciones, y repleta de empatía y sentido común.